Al principio no hay nada. quizás un descampado, lugares desolados...o lugares con posibilidades, eso depende del ojo de quien mire. Todos conocemos lugares llenos de encanto y magia que nos gustaría visitar pero rara vez tenemos la oportunidad de ver como se crea esa magia de la nada. Y como todas las grandes cosas todo comienza con unos visionarios esforzados y mucho ,mucho tesón. Una lona, unos cuantos aparatos técnicos y mucha ilusión...luego a crear..artistas de todas partes se van acercando y se va generando poco a poco una energía; aquel descampado comienza a transformarse en un punto de referencia, la desolación de la nada empieza a vislumbrar el flujo de la vida.
y luego llegan los más importantes: el público, aquellos que vienen a ser sorprendidos, que vienen a relajarse, que vienen a que les insufles ánimo, que vienen a aprender, que vienen a verse reflejados, que vienen a completar sus vidas, que vienen a cerciorarse que mas allá de sus trabajos, de sus inquietudes y sus miedos, los humanos somos más humanos cuando compartimos en grupo.
Por esto la Susi quiso nacer allí, para aportar su gotita en el mar, su granito de arena, y dejar allí su trocito de alma para que esa energía creativa siga creciendo sana y fuerte y poco a poco más personas asistan al nacimiento de algo donde ellos también pueden participar, involucrarse, ser parte.
Visiten la Carpa y háganla crecer. Y crezcan con ella.
(fotos:Asier)
